La diabetes es una enfermedad crónica que se origina cuando el páncreas no produce insulina suficiente o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que produce.
Es una hormona que produce el páncreas y ayuda a que la glucosa de los alimentos ingrese en las células para usarse como energía.
La diabetes de tipo 1 se caracteriza por se caracteriza por la ausencia de síntesis de insulina, es decir, el cuerpo no produce o produce poca insulina. Se diagnostica con mayor frecuencia en niños, adolescentes o adultos jóvenes.
Diabetes mellitus o de tipo 2: Tiene su origen en la incapacidad del cuerpo para utilizar eficazmente la insulina, lo que a menudo es consecuencia del exceso de peso o la inactividad física.
Gestional: se detecta por primera vez durante el embarazo. La mayoría de las veces, este tipo de diabetes desaparece después de que el bebé nace.
Los síntomas suelen ser sutiles y pueden aparecer gradualmente.
Debido a que la diabetes mellitus o tipo 2 se desarrolla lentamente, algunas personas con el nivel alto de azúcar en la sangre no presentan síntomas.
Para confirmar el diagnóstico, se deben hacer uno o más de los siguientes exámenes:
La diabetes mellitus tipo 2 se puede contrarrestar con cambios en el estilo de vida, especialmente bajando de peso con ejercicio y comiendo alimentos más saludables. Algunos casos de diabetes tipo 2 se pueden también mejorar con cirugía para bajar de peso.
La insulina es el único tratamiento para la diabetes tipo 1. hoy en día solo puede administrarse inyectada, ya sea con plumas de insulina o con sistemas de infusión continua (bombas de insulina).
Si notas cualquier signo o síntoma posible de diabetes, consulta con tu médico. Si se diagnostica a tiempo, podrás controlarla y disfrutar de una vida activa y saludable.
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